Esta rama de la Odontología atiende y trata las distintas enfermedades bucodentales desde la infancia más temprana hasta la finalización del crecimiento. Por tanto, el odontopediatra se encarga de explorar la cavidad oral del menor y detectar posibles anomalías en la dentición temporal (dientes de leche), y trata de aplicar un tratamiento individualizado según las necesidades del niño o niña.
Por lo tanto, su objetivo es asegurar un estado bucodental adecuado de cara al futuro, garantizando la salud oral de los niños y promoviendo hábitos saludables de higiene dental que duren toda la vida.
El cuidado dental infantil es importante porque los niños pueden ser más propensos a las caries y otros problemas dentales debido a su dieta, su higiene bucal y el desarrollo de los dientes. Además, los problemas dentales en la infancia pueden afectar el desarrollo de los dientes y la mandíbula, y pueden causar problemas en la salud oral a largo plazo.
El cuidado dental de los niños incluye la prevención y tratamiento de las caries, la enseñanza de hábitos de higiene bucal adecuados, la evaluación del desarrollo dental y la identificación de cualquier problema temprano en el proceso de desarrollo dental.
Así, la técnica de cepillado de los menores requerirá de cierta habilidad. Por eso, los padres tendrán la importante misión de enseñar y ayudar a sus hijos a cepillarse los dientes de forma correcta. Aunque a partir de los 5 años el menor puede hacerlo solo, es fundamental que el padre o madre le acompañe y oriente en caso de que sea necesario. De este modo, se recomienda una supervisión directa hasta que el menor cumpla al menos los 7 años aproximadamente.
Cabe mencionar también que la odontopediatría incluye igualmente el cuidado dental de niños con necesidades especiales, como aquellos con discapacidades físicas, cognitivas o emocionales. Los dentistas pediátricos pueden trabajar con otros profesionales de la salud para proporcionar un cuidado dental integral para estos menores.
En cuanto a las enfermedades dentales infantiles más comunes, podemos destacar dos:
Caries dental
La caries es la enfermedad crónica más frecuente en la infancia, especialmente entre los preescolares. Esta patología infecciosa está causada por el consumo elevado de azúcares y tiene graves repercusiones en la salud del pequeño, como pueden ser: dolor intenso, infecciones faciales y visitas de urgencia. Los motivos suelen estar relacionados con una higiene oral deficiente, la lactancia materna o el biberón y la ingesta frecuente de carbohidratos.
Traumatismos dentales
Por otro lado, los golpes y accidentes son también muy habituales entre los menores. Existen diferentes tipos de lesiones de este tipo, algunas de las cuales podrían afectar a la formación de los dientes de forma permanente. El procedimiento más recomendable en estos casos es acudir inmediatamente al dentista para examinar al paciente y aplicar el tratamiento más adecuado en cada caso.
Para evitar estos problemas, será fundamental el cuidado y la higiene bucal de los menores aplicando métodos como los mencionados anteriormente.
