Cepillo de dientes, ¿manual o eléctrico?

Los cepillos eléctricos presentan ventajas sobre los manuales. Sin embargo, hay ocasiones en las que el cepillo tradicional es más conveniente.

De igual modo, ambos cepillos son eficaces para realizar un cepillado dental adecuado siempre que se sigan unas recomendaciones básicas.

Ventajas del cepillo eléctrico

• Reduce más placa bacteriana, que es responsable de la producción de caries y la aparición de gingivitis.
• Son más respetuosos con el esmalte debido a que presentan un mecanismo de control de la presión.
• Además, se ha comprobado que las personas que usan cepillos eléctricos suele dedicar más tiempo al cepillado que los que emplean cepillos manuales. (Entre un 20-40% más).

¿Cómo elegir el mejor cepillo dental?

Si hay duda con respecto a qué cepillo utilizar, los estudios actuales indican que los cepillos eléctricos con tecnología «oscilante-rotatoria» consiguen mejores resultados tanto en limpieza como reducción de placa bacteriana hasta en un 20% más que otros sistemas.

Los cepillos eléctricos, además, son muy recomendables para personas con alguna discapacidad, enfermedad, o que presenten problemas o limitaciones en cuanto a mantener su higiene personal.

Guía para elegir el cepillo manual

La primera precaución que se debe tener a la hora de elegir un cepillo, es saber si se necesita uno normal o uno específico, pero será el dentista quien lo indique. Principalmente debemos fijarnos en 3 parámetros:

• En la dureza de las cerdas del cepillo (nunca deben usarse cepillos de dureza alta).
• En el tamaño de la cabeza del cepillo (se debe alcanzar todos los rincones de la boca).
• En el diseño del cepillo (los hay más o menos curvados).

Por ejemplo, después de una cirugía en la que existe una zona dolorida y suele haber puntos de sutura, es recomendable usar un cepillo de cerdas ultrasuaves, ya que permite un cepillado más delicado y se puede controlar mejor la intensidad que se ejerce en la zona afectada.

En el caso de la ortodoncia, también suele recomendarse un cepillo manual ya que los eléctricos podrían desprender algún bracket o alambre si no se usan con cuidado.

Por último, en los niños, suele recomendarse también un cepillo manual ya que hay más oferta de este tipo de cepillos para su tamaño de boca y manos, aunque no habría ningún problema en usar uno eléctrico.